Cuando pensaste que no había posibilidad de un dolor más profundo
cuando pensabas que la fuerza nacía y brotaba sola
cuando sentiste que ya nada era necesario
cuando las cosas eran simples y cristalinas
cuando viste que todo a tu alrededor flotaba
cuando tu mirada se iluminaba al paso
cuando una voz hacía que tu corazón latiera más fuerte...
Nunca des por sentado que no haya un dolor más profundo
siempre habrá que sacar fuerzas de donde no hay
notarás cuán necesarias son algunas acciones
y las cosas serán difíciles y enrarecidas
verás que hay que poner los pies en el suelo, fuerte
y tu mirada se volverá mustia
y esa voz provocará la tristeza más despiadada que pueda existir.
M.C.S. IV-IX-MMXII
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