9.1.07

Padrecito nuestro, que estás en la pantalla, santificados sean esos ojos claros; venga a nosotros tu sonrisa; hágase tu voluntad en la tierra como aquí en mi casa cuando tú desees. Danos hoy nuestro regocijo al mirarte cada día; perdona nuestras babas, como también nosotros perdonamos semejante belleza en la tierra; déjanos caer en la tentación, y abrázanos, abrázanos. Amén.





2 comentarios:

Ana dijo...

ay papucho!!!!!!!!!!!!!!!! voy a pecar más seguido asi te tomo la ostia padreeeeeeeeeeeee!!!!!
que me posea el diablo asi me tiras con tu agua bendita!!!!!
vení que te sostengo al sotana.....

MCS dijo...

y yo que lo quise hacer sutil... y bueh, hay amigas que una no las puede controlar...